El comportamiento de los niños es de gran importancia en su proceso de crecimiento y desarrollo. De hecho, condiciona su capacidad de adaptarse al mundo que les rodea y de adquirir habilidades sociales necesario para su bienestar y su desarrollo. Por lo tanto, es esencial comprender cómo se comportan los niños y qué factores influyen en su comportamiento.
Factores que influyen en el comportamiento de los niños
Muchos factores pueden influir en el comportamiento de los niños, incluidos los siguientes factores:
- el temperamento,
- autorregulación,
- el miedo,
- el cansancio,
- inseguridad.
Cada uno de estos factores puede tener un efecto positivo o negativo en el comportamiento de los niños.
el temperamento
Primero: el temperamento es el carácter innato los niños, es decir, su manera espontánea de reaccionar ante las situaciones. Los niños con un temperamento más difícil pueden ser más impulsivo, irritable Y reactivos que aquellos con un temperamento más fácil. Los niños con temperamentos más difíciles pueden exhibir un comportamiento agresivo o rebelde.
Cuando su hijo tenga un temperamento inquieto, ofreciéndole una actividad tranquila como:
- la lectura
- un juego de ensamblar las formas en una esfera
- tarjetas de notas
Al principio puede experimentar dificultades pero con el tiempo si encuentras una actividad que le apasione, cada vez disfrutará más y esto le permitirá estar tranquilo durante parte del día.
En definitiva, lo principal es que estos niños vayan alternando el tipo de actividad, que se esfuercen lo suficiente pero también que aprendan a concentrarse unos minutos al principio y luego un poco más en el futuro.
Autorregulación
Segundo: la autorregulación se refiere a la capacidad de un individuo para controlar las propias acciones y sus propios sentimientos. Los niños que tienen una buena autorregulación tienen más facilidad para controlar su comportamiento y manejar sus emociones. Desde una edad temprana, el niño tendrá su propia experiencia. Cada situación vivida, le permitirá aprender a reaccionar de acuerdo a lo que siente, intentando adaptarse. Utilizará una variedad de medios para lograr su objetivo.
Todos recordamos a nuestro hijo
- Tirado en el mesa para cambiar pañales, retorciéndose para intentar agarrar la botella de leche limpiadora
- O cuando no puede caminar y decide unirse a su juguete favorito al otro lado de la sala.
En estos casos específicos, el niño se toma el tiempo de observar, piensa en cómo lograr su objetivo y en cuanto cree que tiene una solución, lo intenta. Esto se llama experimentación por prueba y error“. a veces tiene éxito a veces falla.
Por tanto, los niños que multiplican experiencias, tienen mejor autorregulación, adquieren más rápidamente confianza en sí mismos. Es menos probable que muestren comportamientos inapropiados y agresivos porque conocen mejor su entorno.
El miedo
Tercero: El miedo es un emoción básica en el niño Puede ser provocado por cosas como situaciones desconocidas o amenazantes, personas o animales. Cuando los niños se enfrentan a objetos o personas que les temen, pueden mostrar comportamientos ansiosos como llorar, gritar o negarse a participar en ciertas actividades.
En primer lugar, cuando el niño tiene miedo, es necesario comprender qué provoca esta emoción. A veces se trata de una falta de comprensión de una situación pasada, en cuyo caso es fundamental tomarse el tiempo para hablarlo con él. Para no dejar que la situación se convierta en una fobia.
El cansancio
Cuarto: La fatiga puede jugar un papel vital en el comportamiento de los niños. Si los niños están cansados, es más probable que muestren un comportamiento agresivo o rebelde y tengan dificultad para hacer frente a las demandas diarias.
Desde la primera infancia hasta la edad adulta, el sueño juega un papel fundamental en nuestro comportamiento: estado de ánimo, actividad, trabajo... Cada período de la vida nos obliga a adaptarnos a nuestra necesidad de dormir.
Los padres deben asegurarse de que los niños reciban suficiente dormir y descansar para evitar que la fatiga juegue un papel negativo en su comportamiento.
Inseguridad
Quinto: En algunas situaciones los niños pueden sentirse inseguros, especialmente cuando se enfrentan a cambios significativos (como un nuevo hogar, un nuevo miembro de la familia, etc.).
Por ejemplo, durante una mudanza que requiera un cambio de escuela, el niño puede temer perder a sus compañeros de clase y no poder hacer nuevos amigos en su nuevo entorno.
Por eso, es fundamental tranquilizarlo y hacer que se encuentre con niños de su edad, invitando a los niños del barrio nada más llegar.
Cuando los niños se sienten amenazados o vulnerables, pueden mostrar comportamientos defensivo como la rabia, allá filtración o eloposición.
¿Cómo fomentar el comportamiento positivo?
En primer lugar, es posible fomentar conductas positivas en los niños teniendo en cuenta su necesidades y al ofrecer oportunidades de aprendizaje apropiado para su edad. Estos son algunos consejos para fomentar comportamientos positivos en los niños:
- Premiar el buen comportamiento: es importante reconocer y rrecompensar los comportamientos deseados. Esto ayudará al niño a comprender que sus acciones son deseables y apreciadas.
- Fomentar las habilidades de autorregulación: utilizar técnicas positivas de autorregulación para ayudar a los niños controlar su comportamiento y resolver los conflictos adecuadamente.
- Enseñar habilidades sociales: enseñar a los niños las habilidades sociales necesarias para interactuar adecuadamente con quienes los rodean y aprender a respetar a los demás.
- Ofrezca a sus hijos oportunidades para explorar : Dar a los niños la oportunidad de explorar su entorno y descubre cosas nuevas. Esto les ayudará a desarrollar su autonomía y aprender habilidades prácticas.
En última instancia, alentar comportamientos positivos en los niños puede ayudarlos a crecer y desarrollar sus habilidades sociales. Aunque ciertos factores pueden influir en el comportamiento de los niños, los padres pueden tomar medidas para promover comportamientos positivos Y saludable en sus hijos.